para ojos los míos

Estoy harta del clorhidrato de amitriptilina, del paracetamol, de la codeína, del furoato de fluticasona, del sumatriptán y de llorar en la ducha. Me he cansado de mirarte, dolor, a los ojos. Ahora vas a mirarme tú. Si es que te atreves.

rebelde sin causa (pero con tilde)

Me acordé de tí, escribes. Y el peso de esa í me asegura que no mientes. Y me da por pensar en un comando rebelde que a partir de hoy tildara todos los monosílabos. Pronto seríamos miles. De momento, tú y yó.

parreño, mon amour

Ya para siempre tendrás lo que te he dado, de mi regalo nunca podrás huir ni devolvérmelo. Eso dijo en su libro "Instrucciones para blindar un corazón". Yo también lo digo. Ahora.

días de nada

Ni siquiera el viento detrás de los cristales.

el futuro, quién sabe

¿Tan sola se siente como para no quitarse el sombrero?, pienso, y me pregunto si mi futuro también será un sombrero rojo.

conclusión con el estómago vacío y la cabeza llena

Sólo llegamos limpios al deseo. Lo demás se aprende con palabras de otros.

pluscuamperfecto

No puedo imaginar nada mejor que un mundo al revés. Donde, por un día, los cipreses sólo crean en nosotros.

malditos kilómetros

La noche y unas cervezas. La noche y sus kilómetros.

my kingdom for a horse

Todo lo que tengo por unas alas. Bien grandes.

quince años tiene mi amor

Un ukelele, cuatro estrellas, quince años.

la lógica del matemático

El matemático observa un yoyó. Y comprende.

time

Golpes de lluvia en las ventanas. Y su voz golpeando mis pulmones, ahora llenos, ahora vacíos. Dulcemente triste, dulcemente feliz. Dímelo tú, Tom, ¿crees que voy por buen camino?

pimienta, mon amour

El ocre gana su batalla contra el tiempo, dice. Con suerte será después del desayuno, estaremos solos, dice. Uno llena de vida el cuarto, dice. Abre un poco las cortinas, mira hacia afuera y encuentra un día lejano. Eso dice, y yo sé que no miente.

vega, mon amour

En un mundo descomunal siento mi fragilidad, decías. Pero a mí ya no me da miedo la enormidad porque sé que alguien oye mi voz. Sé que hay alguien más ahí. Lucha de gigantes, decías.

la tapia amarilla

Compre una casa de lata en Londres, allá por 1990, sólo por gastar las libras que me sobraban. Al final se convirtió en uno de esos objetos imprescindibles, que miras y te detienen. La luz sobre esa casa. La luz amarilla sobre esa casa, ahora.

noviembre en la piel

Algo me dice que hoy comienza la vida. Otra vez. De nuevo. Siempre.

calero, mon amour

Encontrar en las viejas cassettes las piezas que te faltaban para rematar el puzzle de un domingo sin sol. Veranos enteros recorriéndote la espalda. Eg and Alice, Nine inch nails, Nirvana, Pizzicato five, Everclear, Radiohead, Lou Reed, The wallflowers, The cure, Green day, Maddening flames. Volver a los diecisiete después de vivir un siglo, dijo alguien. Justamente eso. Y celebrarlo con fuegos artificiales por los pasillos de casa.

el punto crítico de la curva fatídica del viajero

Hay ese eme eses que son ese o eses.

single room

Decir en voz baja, ¿qué hago aquí?, ¿por qué este vacío?, ¿de dónde este dolor? Y a pesar de todo reconocerse en la luz, en lo provisional, en lo ajeno. Y desear que el viaje no acabe nunca.

ory, mon amour

Escribo lo que me dictan las sirenas, dijo. Ahora, estés donde estés, díctame tú. No dejes de dictarme.

cuarenta y seis

Un año más. Curiosidad y ganas, las mismas.

surfin bichos, mon amour

El tiempo pasa y nos aplasta. Y mi dulce soledad, y mi dulce oscuridad. Y tú tan lejos también buscando luces en el horizonte. Y hace tanto frío en la calle.

cèline, mon amour

¿Y a dónde ir, fuera, decidme, cuando no llevas contigo la suficiente suma de delirio?

los domingos al sol

La eternidad de los domingos, la eternidad de la luz de los domingos. Ya nadie se acuerda. Yo sí.

el diálogo de las tazas

Me preguntas de qué hablan las cosas quietas a las diez de la mañana. Y la pregunta me duele. Y la respuesta me duele. Y la luz de las diez de la mañana me duele.

mascota

El amor me ha dejado en la terraza una higuera que da sombra y que da higos, como dice la canción. Sólo tengo que cuidarla para que se haga grande y fuerte. Pero, ¿qué come una higuera?, ¿cuántas veces hay que sacarla?

diálogos posibles [21]

-El tipo ése, Andy Goldsworth, me dejó con la boca abierta. No me importaría reencarnarme en algo así.
-Si te reencarnas en él, búscame por favor.
-Vale, pero y si tú te has reencarnado, no sé, ¿en una tortuga?
-También.

astrud, mon amour

Voy a atarme una cinta en el dedo para no olvidarme más, que no se me olvide más que todo da lo mismo, nada depende de ninguna decisión.

días de no

Cuando todo a nuestro alrededor conspira contra nuestra dulce amarga tristeza. Cuando hasta el cesto de la ropa sucia parece escupirnos a la cara su estúpida felicidad.

nada, ni la luz siquiera

Tenías razón, nada vuelve por más que nos empeñemos.